El Libro de los Conjuros
La poesía es invocación y conjuro; es bendición y maldición, entrada y salida, adivinación y crónica. En El libro de los conjuros, Irizelma Robles comienza —como buena bruja (sus libros anteriores lo evidencian) consciente de la importancia del espacio en que se debe interpelar a la poesía—por preparar el escenario para las ceremonias. Desde los distintos altares, entonces, sus conjuros pretenden materializar lo que nombran: no otra cosa es la función de las palabras. Encerradas en la boca, en la urdimbre de un tapiz, en la caldera de un volcán, las palabras son urgidas a su verdadera vida.
Estos poemas, que son rezos muy bien cuidados, poderosos y conmovedores reclamos, incurren en juegos de vocablos para darle más sonoridad a lo que escucharán los dioses, otros alquimistas, nosotros. Se trata de poemas breves, rotundos con los que, también, invoca a las rocas, a los metales y minerales, transformándolos en esos nuevos espíritus indispensables para conformar el mundo.
En este libro, Irizelma Robles logra que Alejandra Pizarnik y Luis Palés Matos se den la mano con ella en una conjura para seducirnos. Adivinadora y cronista, la autora misma funciona como un volcán que exuda su mejor magma. Robles no necesita bautizos. Se mueve desde hace tiempo como luminoso y ágil pez en las aguas de la poesía puertorriqueña.
Vanessa Droz
Editorial: Folium | Páginas: 83 | Año: 2018 | ISBN: 978-0-9909043-4-2