Las Buenas Prácticas Agrícolas tienen que verse como un conjunto de recomendaciones, leyes y reglamentos que permiten al agro empresario el desarrollo de una operación agrícola en cumplimiento con la inocuidad de los productos (en este caso frutas y vegetales), seguridad y salud de los empleados y la protección del medioambiente. De manera que en un sentido más amplio se trata de producir alimentos de alta calidad nutricional, con procesos y procedimientos eficaces y eficientes que a la vez que cumplen con las Buenas Prácticas Agrícolas, impulsan la razón de la empresa y la maximización de la ganancia. En este trabajo hemos concluido un repaso de los elementos biológicos, con énfasis en la morfología y fisiología de la lechuga como cultivo de importancia económica y adaptable a las técnicas tradicionales, de hidroponía y ambientes controlados. Hemos partido del conocimiento tradicional y del cultivo en suelos para complementarlo con el conocimiento y recomendaciones para las técnicas y tecnologías más avanzadas. De esta manera el lector, en especial aquellos que están iniciando o que ya estén operando un agronegocio, puedan partir de una base de conocimientos para implementar recomendaciones y tecnología que impulse el desarrollo de la agro empresa.
